Suena la mañana, y despierto aún me siento lejos de mi de lo que creo que soy, y qué soy? y llega muy de mañana la pregunta que desvelaba mi vida, y que como una sombra se instaló a mi lado. Y suena el rancio y violento metal de un carrito de basura que arrastra rápidamente un joven recogedor de basura, rompe el silencio, un silencio que se aleja como la noche, y llega la mañana, una más, otro día, la vida que sigue y oigo que muchos mueren, que la pandemia sigue cobrando vidas, algunas ya muy conocidas, cerca, muy cerca está la muerte en estos días y todos nos reinventamos y me sirvo un vaso de agua, que calma la sed que me ataca en el amanecer, un amanecer helado, un frío que no cede entre los tímidos rallos de sol que penetran los altos árboles de la casa. ¿Dónde está el aliento que describen los sabios? ¿en donde está la visión del rallo de vida?. Aquí estoy hablando contigo, porque en el silencio está el grito de sabiduría que siempre pedimos, pero no nos callamos, es di...
Paso y dejo lo mío, luego se vuelve tuyo es entonces un pozo, si bebes de él se llena si no se vacía y marcho a galope, vas y voy y vamos dejando algo que de a poco me describe pero nunca me alcanza. Somos un enigma, y nos vamos conociendo, en cada letra me describo y juego a que te mires, porque en ti me veo y a veces nos encontramos, gracias por pasar por la ruta en la que sigo danzando.