Entra por una
ventana rota y oxidada
se filtra así sin
preguntar más.
Es esa luz que
abre mi mente
está ahí, allá y
acá, en paz.
Transgrede mi
caos, lo envuelve.
me hace sudar de
silencio.
Cuánta urgencia
de ser yo,
sin envolturas ni
desiertos
sin suposiciones ni
pleitos.
Despierto,
haciendo lo que siento
al oírte me oigo,
ahora canto.
Que se alargue
esta visión
que se expanda el
día de hoy.
Me bebo la ilusión
sin dedicatorias
antes de caminar
ya corría,
volaba entre
luces que coreaban
risas sin fin,
sin intención
panes en la mesa
servidos en silencio,
con una discreta
e impaciente mirada
mirada sin sombra
que me expulsaba
siempre detrás de
la ventana.
ahí mirando pasar
la vida
sin tantas
promesas al viento
ahí estás y ahora
bebes este momento.
Un silencio que
se me encaja
que me arpa el
canto leve
que alza un deseo
vivo.
Es para mí,
porque es a para ti.
es para servir en un alma dispuesta
que mira desde
ahí, desde allá.
Vivo y despierto
canto de amor
deja que crezca
esa voz libre
colores que
dibujan mi aliento de paz.
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