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Mostrando entradas de septiembre, 2019

AYER LE VI LAS NALGAS A MI MAMÁ

"Me duele la cadera, no lo soporto hijo", me dijo Coco cuando aún se escuchaba el canto de la luna que a media noche expandía su luz. Me duele mucho, y ya esa segunda afirmación me la dijo con lágrimas y desesperación como un niño que no mira a otro lugar y que el dolor se traga su razón y toda su atención. Aquí mira, aquí me duele, coco me señalaba su cadera y un poco más abajo, entonces empecé a tocar su cuerpo, y lo hice como cuando toco el de mis hijos. Pude sentir en ese momento como estaba contracturada su pierna justo hasta la rodilla, su llanto me empezó a presionar, pero sabía que era muscular y que con relajante y un masaje en toda la pierna y hasta la cadera podría ayudarla un poco. Le di la pastilla, y luego un masaje. Miré sin remedio sus nalgas y le di un masaje, y entendí que esto de cuidar no es broma, que el servicio es completo que el cuidado de los padres es exactamente igual al cuidado que ellos tuvieron con nosotros y puede ser una tontería pero es la pri

MEDUSA Y MI PAPÁ

Era ese monstruo que se tragaba mi paz, la de mi madre, mis hermanas, y vi como se tragó a mi padre, estaba ahí hechizando todo, encantando a hombres y mujeres; desencantando la risa que aún guardaba. Entraba la luz a la mitad de la sala, una sala que con dos pasos la cruzabas, y con cinco más recorrías toda la casa, y siempre fue una residencia de Reyes que hospedaba mi risa y mis mundos. Un caballo de humo atado a los jardines inmensos de mi casa y el viento alimentando mi fantasía que era más grande que la realidad sin techo que se tragaba mi poca alegría. Miedo a perderte, un día fuiste mi héroe, luego mi villano, amaba lo que eras hasta que te conocí. Viejo lindo, ¿para que me trajiste al mundo si te ibas a ir? te oí decirle a tu padre, a ese hombre que apenas conociste, que nunca conocí, te dejó a la mitad de la calle de ese pueblo que parece un sueño donde las nubes y el silencio andan desnudos sin que nadie los detenga. Te dejó con esa terrible herida que nunca sanó, con esa he

SI VES EL MIEDO Y EL MIEDO TE VE A TI COMO MEDUSA TE DESTRUYE

Si ves el miedo te vuelves el miedo, si ves la ira, te vuelves la ira, si ves el amor te vuelves el amor. Ahora lo entiendo, o más bien puedo recordarlo .   Si tu ves el miedo no pasa nada, pero si el te ve a ti, te encanta, te hechiza como medusa que con solo mirarla te convertía en piedra, Así todas la emociones, puedes mirarlas, observarlas, pero si ellas te observan a ti, te transformas en ellas. He dedicado gran parte de mi vida a entender esto, y ahora puedo verlo claramente. Al identificarte con alguna emoción es aceptar la emoción y te vuelves eso que miras, a veces te sorprendes de como perdiste el control, o como te entregaste a un momento , y es justo cuando puedes entender que es como medusa que te hechizó, o más bien te dejaste hechizar, porque antes de que te mirara hay algo que te dijo -no la mires- pero no le hiciste caso. Claro no es fácil, no lo es, sobre todo cuando has crecido mirando un mundo que se entrega sin pensarlo a las emociones sin control. Pero tienes qu

TÚ ERES TÚ Y YO SOY YO.

Carta a mi Viejo amigo Juan, que por un tiempo fue uno de los puentes más maravillosos que haya conocido y que me cruzó a mi esencia, a este que ahora soy y que después de un rato la dejé de lado. También el se alejó, pero de las alejadas más dolorosas, porque son esas las que en el mismo lugar donde vivimos, no nos saludamos, porque de repente la razón se desvanece y no hay explicación alguna. Así que me hice aún lado, dejé de oirlo y de esperar algo. Aun recuerdo las palabras de Leonel, el amigo en común que teníamos y que antes de morir sufría por el egoísmo de Juan al no acercarse a visitarlo en los dos años que tuvo cáncer. Juan, que había vivido con Leonel, que habían pasado días y noches juntos, no fue capaz de visitarlo. "estoy muy decepcionado de Juan, pero ya mejor ni pienso en eso" me decía Leonel con un ligero raspor en su garganta que me hacía entender que realmente le dolía esa actitud. -Así es él le decía yo-, no esperes nada, es un tipo muy raro, no piensa má